Inicialmente las noticias que había que transmitir debían de ser escuetas y no muy frecuentes (prevenir ataques, conocer el desarrollo del combate, impartir órdenes, etc…) dada la escasa capacidad de los medios de transmisión antiguos, pero a mayor velocidad de la proporcionada por la mensajería y sin riego para el mensajero.
A principios del siglo XIX, la luz percibida por el ojo humano y con la ayuda de un catalejo, constituye la base de la telegrafía óptica como medio de enlace. Sus elementos esenciales son: una torre de cierta elevación, un aparato mecánico que permita enviar signos, letras, palabras, etc… de acuerdo con un código y un anteojo para divisar las señales de distintos colores. Los medios más comúnmente empleados eran las banderas y las pistolas de señales, los cohetes, los heliógrafos, los aparatos sobre mástil con dos aspas transportados en carruajes de campaña, y el aparato de luces (o linternas) Magín para comunicaciones nocturnas. Innumerables torres de telegrafía óptica se extendieron por la geografía de todos los países formando verdaderas redes de comunicaciones.
La primera aplicación militar conocida de la telegrafía óptica data de 1.805, en las líneas de Cádiz, ideada por el Tte. Col. de Ingenieros D. Francisco Hurtado y, posteriormente, aunque a pequeña escala en la guerra de la Independencia (de 1.808 a 1.814). El telégrafo volante de campaña de 1.829 inventado por el coronel de Ingenieros D. Mateo Hurtado, fue utilizado en la primera Guerra Carlista.
Este sistema de telegrafía óptica duró más de medio siglo, llegando a constituirse redes civiles en España que funcionaron de manera simultánea con la telegrafía eléctrica que, impulsada con la aparición del ferrocarril, alcanzó un rápido desarrollo al proporcionar mayor velocidad de transmisión, en el envío de mensajes, que la telegrafía óptica.
Todavía hoy se conservan en España cientos de torres de telegrafía óptica que formaron parte de la antigua red telegráfica que cruzaba la Península de norte a sur.
Torre de telegrafía óptica en BarcelonaA principios del siglo XIX, la luz percibida por el ojo humano y con la ayuda de un catalejo, constituye la base de la telegrafía óptica como medio de enlace. Sus elementos esenciales son: una torre de cierta elevación, un aparato mecánico que permita enviar signos, letras, palabras, etc… de acuerdo con un código y un anteojo para divisar las señales de distintos colores. Los medios más comúnmente empleados eran las banderas y las pistolas de señales, los cohetes, los heliógrafos, los aparatos sobre mástil con dos aspas transportados en carruajes de campaña, y el aparato de luces (o linternas) Magín para comunicaciones nocturnas. Innumerables torres de telegrafía óptica se extendieron por la geografía de todos los países formando verdaderas redes de comunicaciones.
La primera aplicación militar conocida de la telegrafía óptica data de 1.805, en las líneas de Cádiz, ideada por el Tte. Col. de Ingenieros D. Francisco Hurtado y, posteriormente, aunque a pequeña escala en la guerra de la Independencia (de 1.808 a 1.814). El telégrafo volante de campaña de 1.829 inventado por el coronel de Ingenieros D. Mateo Hurtado, fue utilizado en la primera Guerra Carlista.
Este sistema de telegrafía óptica duró más de medio siglo, llegando a constituirse redes civiles en España que funcionaron de manera simultánea con la telegrafía eléctrica que, impulsada con la aparición del ferrocarril, alcanzó un rápido desarrollo al proporcionar mayor velocidad de transmisión, en el envío de mensajes, que la telegrafía óptica.
Todavía hoy se conservan en España cientos de torres de telegrafía óptica que formaron parte de la antigua red telegráfica que cruzaba la Península de norte a sur.
Más información en el Blog: http://blogs.ya.com/moralzarzal/c_27.htm
Banderas de señales (blanco/negro)
Pistolas de señales
La foto del telégrafo de Moralzarzal me suena:
ResponderEliminarhttp://blogs.ya.com/moralzarzal/c_27.htm
blogmoral
Anónimo: es cierto que te suene, pero estas fotos aparecen también en un catálogo editado por el Ministerio de Defensa y se supone que tienen los permisos necesarios. Un saludo.
ResponderEliminarEn efecto, Como bien dice Julio, en todas las imágenes que en este blog son publicadas, excepto las nuestras propias, se hace mención expresa del autor y de la fuente de forma rigurosa.
ResponderEliminarLa imagen del telégrafo de Moralzarzal está contenida en un catálogo del Ministerio de Defensa.
No obstante, nuestra política es, antes de publicar una imagen sometida a derechos de autor, solicitar los oportunos y preceptivos permisos del propietario de esa imagen. En caso de ser así, rogamos se nos comunique a los efectos que sean oportunos.
¿Como puedo ver ese catálogo? No digo que no esté ahí, si lo decís me lo creo pero entonces ha sido el Ministerio de Defensa el que la ha cogido sin permiso. Porque esa foto es la mía seguro, mirad las nubes.
ResponderEliminarLa imagen no tiene ninguna licencia, por lo menos yo no la he registrado de ninguna forma.
Sólo quiero ver lo del Ministerio por curiosidad más que nada. No pasa nada, dejad la foto sin problemas.
Un saludo
blogmoral
Anónimo: te hemos puesto un enlace a tu Blog, para que no te sientas tan perjudicado.
ResponderEliminarSobre el Catálogo habría que saber de qué año es, pues editan uno distinto a medida que van aumentando los fondos del Museo del PCMMT.Esta foto en concreto está metida en un CD-rom de edición y distribución restringida (sólo para militares). De todas formas, si quieres que quitemos la mencionada foto, la retiramos de inmediato.
Un saludo.
Hola,
ResponderEliminarno hace falta, ni siquiera que enlacéis. Ya os dije que la dejarais sin problemas, no me siento perjudicado. Simplemente quería saber de dónde había salido la foto. Nada más.
Un saludo
blogmoral
Blogmoral: se nos olvidó decirte que las portadas del Cd-rom y los catálogos de donde extraemos las fotos están en la Sección de este mismo Blog titulada: "Bibliografía". Un saludo.
ResponderEliminarEstoy buscando el carro móvil de Mateo Hurtado. ¿Dónde se conserva?
ResponderEliminarCarlos Mathé