Entre 1980 y 1982, que yo recuerde, el saludo a los Cabos primeros se hacía exclusivamente cuando hacíamos semanas o nos tocaba guardia en el polvorín (Suboficial de guardia).
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Claro está, que muchos lo hacían y no por exigencia sino porque era una especie de “buena costumbre”.
Por lo que a mi respecta, cuando se me hacía el saludo, siempre lo devolvía con la debida marcialidad también en honor a esa “buena costumbre”.
A este respecto, recuerdo también una anécdota de los tres meses que estuve como Cabo 1º enlace:
En uno de los viajes que se hacían al Gobierno Militar a llevar papelotes para las firmas, me crucé en la entrada con otro Cabo 1º pero legionario.
Este me hizo un saludo de estos de película. Claro…yo no quise ser menos y no me quedé corto, pues por aquella época, como ya he narrado en otras entradas de este blog, mi futuro iba a estar ya ligado a las Fuerzas Armadas por muchos años.
Bueno…pues tan marcial debió ser mi saludo que debí contagiar a otros soldados que rondaban por las proximidades y se produjo una escalada de saludos y taconazos de antología.
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